Los moriscos que se quedaron. La permanencia de la población de origen islámico en la España Moderna (Reino de Granada, siglos XVII-XVIII)
Abstract
La investigación desarrollada en los últimos años y plasmada en este artículo supone una radical revisión de nuestras creencias en lo relativo a la expulsión de los moriscos de España a partir de 1609. Para el caso del reino de Granada, el autor demuestra que permanecieron en él millares de descendientes de musulmanes, que consiguieron burlar de diversas formas los decretos regios, ocultando su auténtico origen a partir de entonces. En los siglos XVII y XVIII buena parte de este grupo acumuló gran riqueza, controlando el negocio de la seda, ostentando igualmente en torno a un centenar de oficios públicos. La endogamia fue su principal característica familiar. La mayoría de estas estirpes se fue asimilando por completo con el paso de las generaciones, si bien quedó un compacto núcleo criptoislámico, procesado por la Inquisición en 1727. Estos condenados mantuvieron vivas sus señas de identidad hasta finales del siglo XVIII.